Lectura de Baudelaire en el siglo XX. Walter Benjamin

 





Baudelaire, el escritor de la modernidad. 3 de mayo de 2021.

Lectura de Baudelaire en el siglo XX: Walter Benjamin.

Paula Kuffer.

 

Walter Benjamin fue el gran crítico, el intérprete de Baudelaire en el siglo XX, le dedicó textos sobre la cuestión de la memoria, que es una de las soluciones filosóficas a uno de los grandes síntomas de la modernidad que es la decadencia de la experiencia. Alegando las grandes transformaciones, la fractura en la subjetividad, la industrialización, la incorporación de la técnica, la multitud, el automatismo. Esta pérdida de la experiencia que se ha tematizado de distintas formas, será determinante en la aproximación que hace Benjamin a partir de la obra poética de Baudelaire. Hay distancia temporal entre el poeta y el filósofo, pero Baudelaire se convirtió en un referente muy importante para Walter Benjamin.

A partir de la obra de Benjamin escrita como prefacio a su propia traducción al alemán de los Cuadros parisienses de Baudelaire, La tarea del traductor, de 1921, la traductibilidad se presenta como característica de toda obra y, recusando la concepción de la traducción como mera transmisión y comunicación, se reivindica la dignidad de la forma. La obra, sometida al trabajo crítico de sus retraducciones, experimenta la prueba de su vitalidad y consistencia. Vauday se propone en su texto —haciendo uso de la atinada metáfora textil— vestir al traductor con los ropajes del crítico, tareas (Aufgaben) ambas llevadas a cabo por el propio Benjamin, particularmente alrededor de la obra de Baudelaire.

    La obra de Walter Benjamin Sobre algunos motivos en Baudelaire, de 1939, sirve para acercarnos filosóficamente a este poeta de la modernidad. Benjamin lo utiliza como testimonio de esta gran catástrofe que es la modernidad para nuestras subjetividades. Se le critica como un texto demasiado descriptivo. Es el último texto que Benjamin dedica a la transformación de la estructura y la cuestión de la experiencia; y nos permite seguir un hilo que lo aleja de lecturas más complejas. En Benjamin hay un proyecto filosófico concreto, muy importante que es la comprensión, transmisión y transformación de su propio tiempo. La experiencia tiene relación con la transmisión, con los vínculos, con la capacidad de generar vínculos. Tiene que ver con la tradición. Es lo que permite la experiencia. La tradición ayuda a salir del aislamiento, que es tan propio de las masas. La experiencia no es privada, es colectiva. No hay posibilidad activa de la transmisión de la sabiduría de la vida.

    El choque es constitutivo de la poesía de Baudelaire. El poeta se debe defender de los golpes “con su esgrima”, “Yo salgo a ejercitar fantástica esgrima”, elabora esta vivencia del choque en experiencia.

     La función de la memoria es la protección de las impresiones, pues el recuerdo tiende a su deterioro. La memoria es en lo esencial conservadora, mientras el recuerdo es destructivo.

     Esos días significativos son los del tiempo de la consumación […] y son los días de la reminiscencia. No señalados por vivencia alguna, no unidos tampoco a los demás, sino destacándose del tiempo.

    Las correspondencias son esas fechas que pertenecen a la reminiscencia. Así, no son históricas, sino que son fechas de la prehistoria.

     En Baudelaire hay una clara voluntad de recuperar la experiencia. 




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