"Una derrota bastante honrosa", de Iris Murdoch

 


Iris Murdoch (1919-1999)Una derrota bastante honrosa, 1970, 

novela de Iris Murdoch

(1919-1999)


Siempre sucede lo mismo cuando acabo la lectura de una novela de Iris Murdoch, es como si saliera de un teatro y hubiera sido espectadora activa de la representación de un trozo de vida. Y digo activa porque he entrado en la casa de Hilda y Rupert Foster, me he bañado en su piscina y he escuchado atónita las conversaciones entre ellos dos y sus invitados, con un vaso de whisky en la mano. He asistido también a sus discusiones filosóficas (tomando notas sobre los conceptos del bien y del mal). También he estado cerca de sus encuentros amorosos y sus confesiones. Y es que estamos ante una novela dialogada, cargada de digresiones de los personajes en las que se cruzan ideas filosóficas sobre la moral, el amor, la bondad y la dignidad. Todas las novelas de Iris Murdoch guardan una cierta intención moral, sus personajes se debaten entre distintas formas de conducta.

            La organización de Una derrota bastante honrosa reproduce una estructura shakesperiana: el matrimonio feliz de Rupert y Hilda, rodeado de familiares y amigos forman una comunidad en armonía que sufre un cierto descalabro con la llegada de un personaje, Julius King, inteligente y diabólico, que pone al descubierto las fragilidades humanas de quienes le rodean: traiciones, infidelidades, enamoramientos furtivos... Todos pueden caer en la trampa de su juego de poder y manipulación y se ven obligados a reconducir su conducta. Cuando uno se enamora, aunque sea de sí mismo porque se siente adulado, descubre entonces nuevas versiones de su carácter, aparecen nuevos rasgos en su personalidad. Se conoce a un nuevo “yo mismo”.

            La capacidad de seducción de Julius y el influjo que es capaz de ejercer sobre los demás personajes es enorme, baste como ejemplo los pensamientos de Morgan, su ex amante y víctima de alguna “humillación”, cuando apunta:

Julius siempre me enseña cosas; es un gran revelador del mundo. No tengo idea de lo que va a pasar, pero me siento ahora como loca. Y la locura puede ser una especie de fuerza espiritual. Veré otra vez a Julius. No hemos terminado aún el uno con el otro y estamos en manos de los dioses. Sí, eso es. Con Julius está una en manos de los dioses, se ha caído una en sus manos. Esto es aterrador pero vitaliza. Se está profundamente en la vida sin arrastrarse ni temblar por los bordes.”

            Aparecen en esta novela los elementos técnicos esenciales de la autora: la tendencia a crear situaciones absurdas, una exquisita habilidad para los diálogos entre personajes variados y opuestos entre sí, armonizando el eco de las distintas voces, con diálogos eficaces para el avance de la trama y el devenir de los acontecimientos. Además aparece aquí como técnica compleja la alternancia de dos diálogos entre distintos personajes narrados a la vez. 

También es un rasgo propio de las novelas de Iris Murdoch, como hemos apuntado arriba, la irrupción de personajes masculinos despóticos y magnéticos, a quienes utiliza para poner en tela de juicio sus ideas sobre el bien, el mal, el amor, Platón, y todo aquello que defendía en sus ensayos filosóficos.

Una derrota bastante honrosa (1970) está considerada una de sus obras maestras dentro del grupo de sus primeras novelas, que se inicia con La campana (1958), Amigos y amantes (1968) y El sueño de Bruno (1969). Y más tarde llegaron las dos novelas más conocidas de la autora: El príncipe negro (1973) y El mar, el mar (1978). Estas tres últimas han sido reeditadas por la editorial Lumen en 2019, y la editorial Impedimenta ha rescatado últimamente las novelas Henry y Cato, El unicornio y El libro y la hermandad.

Pero lo cierto es que de las veintiséis novelas de Murdoch, he leído once editadas en español y este ejemplar de Una derrota bastante honrosa lo he comprado en una tienda de libros de segunda mano. Pertenece a una preciosa colección de clásicos en tapa dura, “Clásicos Contemporáneos Internacionales”, de Planeta (1997). No existe reedición. Además, algunos títulos, como por ejemplo, La campana, solo aparecen por la red con precios exorbitantes. Es triste que de una obra tan amplia solo encontramos unas cuantas novelas y gracias a las reediciones de Impedimenta y Lumen. Quiero hacer una llamada a los editores para la revitalización de la obra de Iris Murdoch.

Es altamente adictiva, créanme.










Comentarios

Entradas populares de este blog

Los niños tontos (2). Sobre los cuentos

"En memoria de Paulina". Un cuento de Bioy Casares

Mi hermana Elba y los altillos de Brumal. De los límites difusos

SOLENOIDE, la novela traslúcida

Los niños tontos (1). Sobre el libro.