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Violencia y Literatura. Cuentos sobre el maltrato

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   'Susana y los Viejos',  de Artemisia Gentileschi.                                                                                   Pese a la distancia espacio-temporal, de contexto y de marco referencial, los cuentos “El indulto” (1883), de Emilia Pardo Bazán y “Subasta” (2018), de María Fernanda Ampuero, comparten el eje temático de la violencia contra las mujeres. El tema aparece representado en ambos con imágenes que despiertan en el lector sensaciones similares. Entre ellas, la rabia, la tristeza o la impotencia ante los abusos, los malos tratos, los feminicidios o la propia inferioridad otorgada por la sociedad a las mujeres. Una primera semejanza relevante en relación al papel asignado a la mujer en literatura: el personaje femenino asume en ambos el papel agentivo, trastocando así los roles de la tradición literaria, algo que en el caso de Emilia Pardo Bazán reafirma su compromiso con las reivindicaciones de los derechos de la mujer a finales del siglo XIX y princi

Mario Levrero y la princesa

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  Mario Levrero Cartas a la princesa   Cartas a Alicia Hoppe Buenos Aires, 1987-1989 Edición de Ignacio Echevarría y Alicia Hoppe. Random House. Barcelona 2024 Mario Levrero (Montevideo, 1940-2004) y Alicia Hoppe se conocieron en 1967, cuando ella entabló una relación con quien sería su marido, Juan José Fernández, amigo de la infancia del escritor. Entre la primera de las cartas que forman parte del epistolario aquí reunido, fechada el 5 de marzo de 1987, y la última, de marzo del 89, asistimos al devenir de una relación que se transforma desde el eje paciente-doctora y pasando antes por la amistad, en una historia de amor repleta de recovecos. Resulta interesante para el lector que la correspondencia sea unidireccional, firmada con la J. de Jorge Mario Varlotta Levrero (más tarde Mario Levrero en los textos literarios), puesto que las cartas de Alicia Hoppe no se incluyen en esta selección. Las razones quedan perfectamente explicadas en el prólogo a la edición, donde Ignacio Echevarr

"Pisando la dudosa luz del día"

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  Modernidad y surrealismo en Pisando la dudosa luz del día (1945) , de Camilo José Cela Ediciones Linteo, 2008 En el elegante marcapáginas que contiene el libro aparece una cita de Gonzalo Sobejano en la que, tras detallar fechas y proceso de edición del mismo, apunta una de las claves para la interpretación de los poemas que un joven Cela escribió entre 1934 y 1936:  “cubre situaciones nocturnas o luctuosas, pero señala la tentativa autoral de la conciencia joven que busca un camino entre las sombras.”  Pisando la dudosa luz del día es un libro que hay que entender en todo su contexto, desde su escritura en el año 1936 hasta su publicación en 1945. Alrededor de ambas fechas fluctúan una serie de circunstancias que serán determinantes. Así, en 1936 confluyen, por una parte, que los primeros aprendizajes literarios de Cela se habían proyectado exclusivamente en el dominio de la poesía en 1935, con dos poemas y una “Autopresentación” en El Argentino; y por otro lado, su relación epistol

La representación del mal en "Estrella distante", de Roberto Bolaño

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  “Cuando bombardearon La Moneda, desde el barrio donde yo estaba, lo oías y de vez en cuando veías a los aviones”.  (Entrevista de Mihály Dés a Roberto Bolaño publicada en la revista Lateral. Nº 40, abril de 1998, sobre su experiencia durante los días del golpe militar en Chile, concretamente sobre los bombardeos aéreos.)             Bolaño narra, además, cómo lo apresaron durante ocho días, en noviembre del 73, dos meses después del asalto, cuando le hicieron bajar del autobús en el que viajaba desde Los Ángeles a Concepción y fue detenido acusado de ser “terrorista extranjero”: “Me asusté: ‘Estoy frito, me matan’.             El contexto en el que se inserta este recuerdo es el último cuarto del siglo XX, en el marco de las dictaduras del Cono Sur americano, donde los ejércitos construyeron espacios para la deshumanización y para el mal, con miles de personas torturadas y desaparecidas. El testimonio de Bolaño evocando la sensación de peligro nos devuelve el eco de Walter Benjam

"Un puñado de flechas", de María Gainza

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  “Vos sabés, el artista viene al mundo con un carcaj que contiene un número limitado de flechas doradas. [...] Puede lanzar todas sus flechas de joven, o lanzarlas de adulto o incluso ya de viejo. También puede ir lanzándolas de a poco, espaciadas a lo largo de los años. Eso sería lo ideal, pero ya sabés que lo ideal es enemigo de lo bueno”. Es la reflexión de Francis Ford Coppola que recoge María Gainza (Buenos Aires, 1975) en la secuencia que abre su último libro, Un puñado de flechas (Anagrama: 2024).        Narradas en primera persona, el libro recoge historias relacionadas con el mundo endogámico del arte contemporáneo y sus propios mecanismos de supervivencia. La autora coloca en el centro el objeto de arte y lo convierte en foco de la narración. Se desplaza entre la crónica, el ensayo y la autoficción en un movimiento que sugiere algo más que el vínculo entre arte y literatura. María Gainza no se limita a hablar sobre las obras y los artistas seleccionados (ejerció durante a

La imagen de la casa en la ficción literaria

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  «Nos reconfortamos reviviendo recuerdos de protección. Algo cerrado debe guardar a los recuerdos dejándoles sus valores de imágenes. Los recuerdos del mundo exterior no tendrán nunca la misma tonalidad que los recuerdos de la casa.» Gaston Bachelard, La Poétique de l'espace     Con la interpretación del espacio y de la espacialidad de manera interdisciplinaria, la categoría de espacio narrativo ha ganado en complejidad, desde su noción más tradicional como elemento puramente referencial de escenarios hasta el cambio de modelo que se ha dado en las últimas décadas. El tránsito en la concepción del espacio se sustenta en algunos estudios que se imponen como textos fundamentales. Es el caso de La Poétique de l'espace (1957), de Gaston Bachelard, dedicado al estudio de la imagen poética. Con el análisis de imágenes del « espacio feliz » o topofilia, el autor configura el espacio poético como una proyección de nuestras experiencias vividas, imaginadas o soñadas. Así, la c

María de Zayas. El convento como espacio de resistencia

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  María de Zayas y Sotomayor (c. 1590- c. 1661 ), escritora relevante del Barroco, cultivó el género de la novela corta, en la tradición de las Novelas ejemplares de Miguel de Cervantes. Las ediciones de Julián Olivares para las Novelas amorosas y ejemplares   (1637), publicada en el año 2000, y los Desengaños amorosos (1647) , de Alicia Yllera en 1983, son textos ajustados a los originales de la obra de María de Zayas. La autora rompe la convención del género, porque rehúye el final feliz en boda y su intención es advertir de los engaños masculinos a las mujeres.             Las dos obras están estructuradas según el modelo boccacciano –frecuentemente utilizado en la época– del Decamerón (1353) pues se trata de la creación de una historia-marco, en la que sus personajes se reúnen para, a su vez, relatar diferentes historias. Se introduce una trama que corre paralela al desarrollo de los saraos: amores no correspondidos de Lisis y don Juan hasta la promesa de matrimonio con don Dieg