Entradas

Iris Murdoch, El libro y la hermandad

Imagen
Traducción de Jon Bilbao Postfacio de Rodrigo Fresán Editorial Impedimenta, 2016     Cuando la vuelva al trabajo, tras el descanso estival, y los compañeros citen los lugares a los que han ido de vacaciones, yo lo tengo claro, he estado veraneando dentro de una novela. Una vez más, y son ya muchas, me he instalado por unos días a vivir dentro de una novela de Iris Murdoch. Y he aprendido algo más sobre la fragilidad de las relaciones humanas. He estado en un baile conmemorativo de Oxford, donde un grupo de antiguos alumnos se encuentran y cuyas vidas se van a entrelazar hasta la última página, la 639. He visitado las casas de los personajes, en Londres, en Irlanda; he asistido a sus veladas literarias, a sus debates políticos, he sido testigo mudo de sus encuentros amorosos, de sus confesiones, de sus anhelos o, simplemente, de sus conversaciones, sus diálogos. No se trata de otra recalcitrante novela del “yo”; Iris Murdoch escribe sobre el “ellos”, orquesta novelas

"Una rosa para Emily". Un cuento de William Faulkner

Imagen
EL ARTE DE NARRAR La certeza de que Faulkner (1867-1962) era terriblemente crítico con su propia obra lo demuestra el hecho de que “Una rosa para Emily” pasara un proceso de corrección que le llevaría a reducirlo hasta la versión definitiva, publicada en una revista de ámbito nacional, Forum , en abril de 1930. No es casualidad que un año antes apareciera El ruido y la furia , novela que pasa por ser uno de los hitos literarios que rompen con el realismo imperante desde finales del siglo XIX. Su originalidad radica tanto en aspectos técnicos: saltos en el tiempo, narrador no omnisciente; como temáticos: la decadencia de una familia sureña, la creación de un territorio de ficción propio, cuya capital, Jefferson, es el escenario también de “Una rosa para Emily”. A pesar de estar concebido en la primera época de su carrera literaria, el cuento despliega una gran complicación temática y técnica. Faulkner consideraba el cuento ( the short story) un género tan complicado y esenc

El bandido. Robert Walser

Imagen
Traducción de Juan de Sola Llovet Ediciones Siruela 2ª edición 2010 El bandido es una de esas novelas extraordinarias que un día se asoman a tus ojos de lector y de pronto parecen devorarte, luego te invitan a desovillar la madeja, para quedar finalmente atrapado en sus redes. El borrador de la historia del bandido fue hallado entre los microgramas de Robert Walser (1878-1956). Se trata de series de escritos abigarrados, trazados a lápiz y en letra casi microscópica. El manuscrito aparece en un conjunto homogéneo, sin título, de 35 párrafos contenidos en 24 hojas que más tarde fueron transcritas, revisadas y datadas hacia 1925.  A este procedimiento de escritura, el propio Walser lo denominaba el sistema del lápiz, a la manera paciente y lenta de los copistas de oficina. Tal vez concibe estos escritos como un ejercicio literario, como un experimento, que le permita esconderse, desaparecer, hacerse muy muy pequeño, casi invisible, (hacerse más pequeño que un dedal)

Desde la sombra. Juan José Millás

Imagen
Juan José Millás, Desde la sombra. Seix Barral Biblioteca Breve 1ª edición. Abril 2016 “Todos los vacíos están llenos” Es una cita de la novela de Juan José Millás (1946), Desde la sombra. Confieso que al leer las primeras páginas de la novela pensé que me hallaba ante otro truco millasiano, otro intento de articular lo real dentro de lo irreal, algo así como la marca de la casa. Se narran las peripecias de Damián Lobo hasta llegar, escondido en el armario, a la casa de una familia donde lo instalan en la habitación del matrimonio de Lucía y Fede.  El armario de tres cuerpos en el que se esconde Damián  recuerda al amplio armario empotrado del apartamento del protagonista del cuento “Trastornos de carácter” (1985), en el que Vicente Holgado, cansado de su vida monótona y aburrido de la televisión, se prepara la huída por un conducto que, según su teoría, comunica todos los armarios del universo. En aquel cuento, el protagonista, en una de sus incursiones, se ve de pron

Los días lábiles. Nueve días, nueve cuentos. Club Marina

Imagen
Labilidad es una palabra bella, de una sonoridad sugerente. Significa “cualidad de lábil”. Esto es, la capacidad o el prodigio de resbalar, de deslizarse y buscar su cauce o quizás no. Los límites en la vida son siempre difusos, lábiles. También lo son entre la vida y la literatura. Uno de los protagonistas de estos meses en torno a los libros ha sido Juan Marsé, quien, a sus 83 años, ha cumplido además los cincuenta años de la publicación de su novela Últimas tardes con Teresa . En alguna entrevista ha dicho que: “La realidad, a veces, es más inverosímil que la ficción” y se pregunta (y nos hace preguntarnos) por qué la ficción ha de ser verosímil si la realidad muchas veces no lo es. Lo ilustra con un ejemplo revelador: apunta que para él, como escritor, está más presente en su memoria como real, el naufragio del Pequod , el barco de Moby Dick , que la tragedia del Titanic, que sí ocurrió de verdad. Pensé, al momento de leer esto, que algo parecido era el vivir literariam

Juan Marsé, Si te dicen que caí

Imagen
El arte de la novela 3 Martes, 7 de junio de 2016 Hoy Andreu Jaume nos recibe en la Sala del Teatre, un espléndido espacio para escuchar literatura con su voz cálida. Aparece con su maletín, puntual y elegante, con un tono bronceado, traje de lino y camisa azul claro... Buenas tardes. Si te dicen que caí es una novela excepcional, la mejor de Juan Marsé. Presenta una serie de dificultades al lector, pero estas no deben disuadirnos sino al contrario, hemos de dejarnos arrollar por su ritmo narrativo. Estamos frente a la condensación de todo el universo de Marsé, un escritor que se hallaba en pleno dominio de todos sus recursos, que había ya conquistado una forma de decir. Apunta Andreu Jaume que Marsé en esta novela dinamita el principio de realismo para ofrecer una visión caleidoscópica de la posguerra española. En el prefacio a la nueva edición, el propio Marsé confiesa: “ Escribí esta novela convencido de que no se iba a publicar jamás. Corrían los años 196

Umberto Eco, Il nome della rosa

Imagen
El arte de la novela, 3 Martes, 24 de mayo 2016             Dice Raffaele Pinto que para Umberto Eco siempre es posible interpretar el mundo, desenredarlo. Es posible que sea por esto por lo que su primera novela pertenece al género policíaco. En El nombre de la rosa (1980) planea un tema fundamental que es la lujuria del conocimiento, que produce placer y es más peligrosa que la lujuria de la carne.   El buen filósofo duda de la posibilidad de que se pueda entender el mundo, que exista un orden que establezca alguna serie de relaciones. Antes de escribir su primera novela, Umberto Eco era un estudioso de Filosofía y un artífice de la Semiótica, disciplina que estudia los signos y los códigos o sistema de relaciones que se establecen entre ellos. Pero antes de descubrir su vocación como semiótico, Eco se formó como estudiante de filosofía medieval, con una tesis sobre la teoría estética de Tomás de Aquino en la que llega a descubrir un sistema estético por el cual se entien